jueves, 9 de octubre de 2014

LLEGÓ TARDE


Mientras estaba cocinando me llamó mi hermana y le conté que estaba haciendo unos involtini de pollo. Rápidamente me preguntó si los hacía con esas pechugas que han salido nuevas y que están cortadas ultra-finas.
¿Mandeee?
Yo no sabía ni que existían. Me cachis en la mar. Su información llegó demasiado tarde. Ya había cortado las pechugas y me habían salido de pena, unas grandes, otras más gorditas. Si lo llego a saber antes, las busco por doquier.
Bueno lo hecho, hecho está. Voy a rellenarlas de espinacas y mozzarella, así mi hijo comerá algo de verdura.

Necesitaré espinacas, mozzarella, pechugas de pollo, albahaca, harina, mantequilla, vino blanco, sal y pimienta.

Hiervo unos 150 gr de espinacas congeladas, hoy no tenía frescas, las escurro bien y las paso por una sartén con un poco de mantequilla y unas hojitas de albahaca para que pierdan el agua y cojan sabor.







Encima de las pechugas salpimentadas pongo las espinacas, un poco de mozzarella y un trocito de albahaca. 
Las enrollo y las fijo con un palillo. Las he cortado tan mal que me las he visto y deseado para poder enrollarlas intentando que no se saliera el relleno. Recomiendo vivamente que se utilicen las pechugas sugeridas por mi hermana.

En una sartén con aceite y mantequilla sofrío los rollitos previamente enharinados. Cuando están dorados por todos los lados les echo un buen chorro de vino blanco y las espinacas que me habían sobrado. Los tapo y los dejo cocer un cuarto de hora dándoles la vuelta y vigilando que no se queden sin salsa, si hace falta les añado un poco de agua o caldo.

Ya tengo los involtini y de paso el acompañamiento. 
Con la media mozzarella que ha sobrado haré una fantástica ensalada caprese a mi manera, receta que ya explicaré otro día.

Como a mi hijo no le gusta el tomate crudo, él se comerá los involtini y yo la ensalada.

1 comentario:

Unknown dijo...

K delicia ✌✌✌✌