Se acabó hacer el vago. Llevo casi cinco meses sin pegar un sello.
Basta ya de dejar que mi
madre guise y estar todo el día jugando en Internet y mirando la tele.
No sé que hará mi mamá
para comer, pero he decidido hacer el chimichurri chileno que me enseñó Aída, salsa
que va estupendamente con todo.

Le pongo el zumo de
medio limón, un buen chorro de aceite, sal y lo remuevo.
Ya lo tengo en la nevera
tapado con film transparente. Haya lo que haya para comer se lo pienso echar
por encima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario