miércoles, 8 de enero de 2014

¡QUÉ ES ESO?


En la carpeta de imágenes para recetas tenía abandonado este dulce que hice cuando aún tenía algunas hojas de aquella masa filo comprada por error.
Ese día se me ocurrió hacer unos barquillos.

Con azúcar glacé vainillado (le había puesto dentro una vaina de vainilla), mantequilla y la pasta filo me metí de lleno en la cocina.



Lo primero reblandecí bien 40gr de mantequilla y la mezclé con dos cucharadas de azúcar vainillado.

¿Cuánta cantidad necesitaba?
No tengo ni idea. Pero me quedaban cuatro tristes trozos de hoja de masa filo. Pues a agotarlos se ha dicho.
 
Los corté para que hubieran dos para cada uno. 

Los unté con la mantequilla dulce, y los enrollé. 

Quedaron un poco chafaditos pero los puse encima del papel del horno y los horneé durante unos 10 minutos a 180°.


Cuando llegó mi hijo y los vio me dijo: “¿Qué es eso tan raro que has hecho?”.
Al decirle que eran barquillos los llenó de nata, muuucha nata, y dijo que estaban bien.  

Si los vuelvo a hacer tendría que añadirles algo que le dieran sabor pues no tenían nada de especial. Eran tan solo una cosa dulce y crujiente.

No hay comentarios: