Hoy es el día de la
madre y me voy a regalar unos dulces rápidos, facilísimos y apetitosos.
Con una masa de
hojaldre ya preparada y la cantidad de azúcar que te guste puedes preparar un dulce delicioso y crujiente.
Extiendes la masa
sobre su papel de horno, la espolvoreas de azúcar vainillado y le pasas el
rodillo sin apretar, solo para que se fije el azúcar.
Le das la vuelta a la masa, y repites la operación. Luego la cortas a tiritas y las retuerces.
¿Qué que es el azúcar vainillado? Es el aroma que desprendía la despensa de mi abuela cada vez que la abría. Sencillamente ponía barritas de vainilla dentro del azúcar, pero está siempre en mis recuerdos.
Bueno, volviendo a la receta, pones la bandeja en la nevera
para que se enfríe y enciendes el horno a 180°.
Cuando el horno está
caliente la introduces y los dejas cocer durante 15/18 minutos.
Aaaaaaa... ¡Me olvidé!
Estaba jugando al Candy Crush en el ordenador, y me olvidé por completo del horno.
¿Y se supone que yo soy la cocinera? Jajaja
Vaya ataque de risa me
ha entrado.
Los iba a llamar
torciditos pero en vista del éxito les queda mejor “Tostaditos… jajaja”.
1 comentario:
¡Ahora sí que me has hecho reír!
Se te queman los lazos de hojaldre y los pones tan cual.
Y yo preguntándote antes si manipulabas las fotos... ¡Que tonta soy! Ja, ja, ja, ja
Si antes abro la boca, antes la m.... me cae en la boca.
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